Geografía
Inicio Relieve Llanuras y montañas

Llanuras y montañas

Publicado por Santiago

LlanuraPodemos integrar todas las formas del relieve en tres estructuras básicas. Las llanuras sedimentarias, las llanuras de rocas metamórficas y las montañas. Cada una de ellas tiene sus formas de relieve asociadas.

Las llanuras sedimentarias se desarrollan sobre grandes cuencas en la que se han depositado sedimentos a lo largo de los siglos. Son los lugares a los que van a parar todos los materiales arrancados y transportados por la erosión. Para que estos permanezcan ahí deben de tener un sustrato de rocas metamórficas hundido y cerrado. A este sustrato se le llama cubeta. Es sobre esta cubeta sobre la que se crean las grandes llanuras de arcilla y caliza. Su forma concreta dependerá de las características del relieve tabular. El peso de los materiales sedimentados provoca movimientos epirogénicos de carácter descendente. Sobre este tipo de llanuras aparecen grandes sistemas fluviales: Amazonas, Paraná, Congo, Duero. Existen dos tipos de cuencas sedimentarias, las de origen precámbrico, muy antiguas, muy grandes y situadas en torno al ecuador y los polos; y las de origen caledoniano y herciniano, más modernas, más pequeñas y situadas en las latitudes medias.

Las llanuras sobre rocas metamórficas se llaman escudos (de origen precámbrico, grandes y situados en torno al ecuador y los polos) y macizos antiguos (origen caledoniano y herciniano, más pequeñas y situados en las latitudes medias). También están formadas por plataformas, pero a diferencia de las cuencas sedimentarias, son superficies de erosión puestas en resalte. Es decir, si la cuenca sedimentaria es la parte de la plataforma en la que se acumulan los sedimentos, los escudos y los macizos antiguos es la parte de la que se desprenden. Los escudos abarcan la mayor parte de los grandes continentes. Escudos y macizos antiguos presentan los restos de las antiguas montañas erosionadas. Es posible que algunos de ellos haya sufrido un rejuvenecimiento durante la orogenia alpina, por lo que pueden estar, de nuevo, en resalte. Sobre estas estructuras se desarrolla el relieve sobre rocas metamórficas y el relieve apalachense.

Las montañas se presentan en grandes cadenas de plegamiento. Las montañas aparecen por el plegamiento o la fractura de los materiales sedimentarios, o las rocas metamórficas. Presentan un gran variedad geológica y de formas. Se distinguen dos tipos de cadenas de plegamiento: las simples y las compuestas.

    Las cadenas de plegamiento simples presentan pliegues de poca potencia, dispuestos rítmicamente, y con un paralelismo muy acusado. En general, se disponen en torno a las cadenas de plegamiento compuestas. Sobre ellas se desarrollan relieves plegados jurásicos (directos o invertidos) y apalachenses.

    Las cadenas de plegamiento compuestas presentan pliegues complejos, con mantos de corrimiento y fracturas, propios del relieve alpino. Tienen un aspecto caótico y muy variado. Los empujes han sido tan fuertes que algunas de las fallas que se crean pueden mostrar restos de vulcanismo. En el eje central de estas cadenas aparece un relieve fracturado con grandes bloques elevados y hundidos. Normalmente se encuentran en la zona más alta de las grandes cadenas montañosas.