La Criosfera
La criosfera es el término que se utiliza para designar el conjunto de territorios del planeta que se encuentran cubiertos por agua en forma sólida (nieve y hielo). Esto abarca no solo las regiones de los glaciares y casquetes polares, sino también el agua helada de mares, ríos y lagos, así como el permafrost.
En su mayor parte, la criosfera es una capa superpuesta sobre la hidrosfera. Como ella, es una parte integral del sistema climático global, ya que influye en los flujos de humedad, la formación de nubes, la generación de precipitaciones o en la circulación atmosférica y oceánica, entre otros aspectos.
La palabra criosfera proviene del griego: kryos (κρύος), que significa frío o hielo, y sphaira (σφαῖρα), que significa esfera o bola. Se estima que cerca del 10% de la superficie terrestre está cubierta por la criosfera, aunque este porcentaje se reduce sensiblemente año tras año.
Elementos que conforman la Criosfera
Son nieve, hielo marino, hielo fluvial y lacustre, permafrost (suelo helado) y glaciares.
- Nieve: Se localiza principalmente en el hemisferio norte (en zonas de montaña), con un volumen estacionario que oscila desde los 3,8 millones de km² hasta los 46,5 millones de km².
- Hielo marino: Se extiende sobre los océanos Ártico y Antártico, con enormes fluctuaciones a lo largo del año. Supone entre el 7% y el 12% del total de la superficie oceánica mundial.
- Hielo fluvial y lacustre: el que se forma en ríos y lagos. Supone un porcentaje mínimo con respecto al volumen total de la Criosfera.
- Permafrost: Suelo helado. Es una capa superficial que contiene agua congelada durante todo el año. Se estima que el 10% de la superficie terrestre está cubierta por permafrost, principalmente en las regiones septentrionales de Asia y América del Norte.
- Glaciares: El 98% de ellos se encuentra en la Antártida. El resto se reparte entre Groenlandia, la Patagonia argentina y chilena y otras zonas de alta montaña. En total, 13,2 millones de km².
Retracción progresiva de la Criosfera
La Criosfera es extremadamente sensible a los cambios que tienen lugar en el clima global del planeta. Desde que se llevan registros sobre la cantidad de hielo y nieve en los océanos y continentes de la Tierra, se ha podido constatar un proceso de retracción lento pero continuo desde principios de la década de los 80.
Donde este proceso se muestra más visible es en los glaciares de montaña, que se han visto disminuidos en un 8% en las cuatro últimas décadas. También el hielo marino, sobre todo en el hemisferio norte, ha experimentado una notable recesión, lo cual ha posibilitado la apertura de la ruta marítima del Norte, que había permanecido cerrada durante siglos.
La desglaciación o deshielo es un proceso natural que ya ha tenido lugar en la Tierra en el pasado. Los científicos estudian cuál es el grado de influencia de la acción antrópica en este proceso. La principal preocupación sigue siendo cuáles puede ser las consecuencias negativas para el equilibrio ecológico global y la habitabilidad de ciertas regiones del mundo.
Imagen superior: Fraxen at English Wikipedia, CC BY-SA 3.0