Geografía
Inicio América, Bolivia La salida al mar de Bolivia

La salida al mar de Bolivia

Publicado por Daniel Terrasa

Bolivia y Paraguay son los dos únicos países de América del Sur que no cuentan con un territorio costero (ver Estados sin litoral). La ausencia de un acceso al océano ha lastrado históricamente el desarrollo de sus economías. El caso boliviano es especialmente más notable, puesto que este país sí dispuso de litoral en el Océano Pacífico hasta el año 1884.

La llamada Guerra del Pacífico enfrentó a las jóvenes naciones de Chile, por un lado, y de Bolivia y Perú por otro entre 1879 y 1884. Hasta entonces, Bolivia tenía soberanía sobre la región de Antofagasta, llamada Departamento del Litoral, que incluía parte del Desierto de Atacama en el interior y una franja de costa de unos 200 kilómetros, comprendida entre la desembocadura de río Loa por el norte y el paralelo 24º S por el sur. Antes de 1879, Antofagasta era una región de considerable importancia económica para Bolivia. La región no solo era rica en minerales como el nitrato y el cobre, sino que también proporcionaba el único acceso directo al océano Pacífico, lo que facilitaba el comercio internacional. Este acceso permitía la exportación de recursos naturales bolivianos y era clave para las conexiones con mercados globales. El desarrollo del puerto de Antofagasta había comenzado a impulsar la economía local, posicionándola como un nodo comercial emergente.

La ocupación militar chilena del Departamento de Litoral dio lugar a su anexión oficial en 1904. Un tratado entre ambos países garantizaba el libre acceso de Bolivia a los puertos con fines comerciales, aunque este punto no siempre se ha cumplido.

Impacto del Tratado de 1904 en la Economía de Bolivia

El Tratado de Paz y Amistad de 1904 tuvo un impacto significativo en la economía boliviana a largo plazo. Al quedar sin litoral, Bolivia vio severamente restringida su capacidad para exportar sus productos al mercado mundial de manera autónoma. A pesar de que el tratado permitía el uso de puertos chilenos, las tarifas de transporte y las barreras comerciales impuestas frecuentemente por Chile complicaron el acceso eficiente al Pacífico. Estas dificultades han contribuido históricamente a un desarrollo económico más lento en comparación con sus vecinos con acceso directo al mar.

De este modo, la cuestión de la salida al mar de Bolivia ha estado afectando de forma negativa las relaciones entre ambos países. Para Bolivia se trata de una cuestión vital, ya que contar con acceso al litoral es un aspecto básico para su estabilidad económica. Sus quejas se fundamentan en que Chile no ha cumplido con los pactos establecidos en 1904.

En el año 2018, la Corte Internacional de Justicia falló acerca de la controversia marítima entre ambos países desestimando las reclamaciones bolivianas. Con esta decisión Chile quedó libre de la obligación de negociar el pleno acceso soberano al océano Pacífico para Bolivia.

Esfuerzos Diplomáticos Actuales

En años recientes, Bolivia ha continuado sus esfuerzos diplomáticos para mejorar la situación de acceso al mar. A pesar del fallo en 2018 desfavorable para sus pretensiones, el gobierno boliviano ha trabajado en establecer diálogos bilaterales y buscar apoyo de organismos regionales. Bolivia ha intensificado su búsqueda de acuerdos con Chile para optimizar el uso de puertos chilenos y ha lanzado campañas diplomáticas que promueven la cooperación regional en el marco de organizaciones como UNASUR, buscando generar un clima más favorable para futuras negociaciones.

Accesos marítimos alternativos

Desde esa fecha, Bolivia ha visto la puerta cerrada a recuperar el acceso marítimo del antiguo Departamento Litoral, por lo que se encuentra buscando salidas al mar alternativas. Estas son con las que cuenta:

Puerto de Ilo (Perú) – Bolivia Mar

En virtud de un tratado firmado en 1992, Perú cedió el puerto de Ilo, al sur del país, y una franja de costa de cinco kilómetros a Bolivia durante 99 años. Esta zona fue bautizada como Bolivia Mar. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos iniciales, el tratado no llegó a concluir y las obras del puerto de Bolivia Mar se paralizaron. La cuestión sigue a día de hoy aún en suspenso.

Puerto Busch (Paraguay)

Esta segunda alternativa es menos atractiva para los intereses bolivianos. Además, a diferencia del proyecto de Bolivia Mar, este sí lleva funcionando desde hace algunos años.

Puerto Busch es un pequeño puerto fluvial del Río Paraguay situado muy cerca de la frontera boliviana. Desde él se puede acceder al Océano Atlántico a través del Río de la Plata tras recorrer más de 600 kilómetros. Esta larga distancia hace que el aprovechamiento de esta opción sea muy limitada.

Existe una tercera opción, todavía no aprovechada, que consiste en el ofrecimiento por parte de Brasil, Argentina y Uruguay para que Bolivia use algunos de sus puertos libres de impuestos con trato preferencial. No es la solución ideal, pero tal vez la única viable a corto plazo para los bolivianos.