Guayana Francesa: geografía física
La Guayana Francesa es, en realidad, uno de los departamentos de Francia: «Departamento de Ultramar de la Guayana Francesa». Es parte integrante de Francia desde 1946. Se ubica al norte de América del Sur entre Brasil y Surinam. Limita al norte y el este con el océano Atlántico, al oeste con Surinam y al este y al sur con Brasil. El río Oyapock y los montes de Tumuc-Humac la separan de Brasil. Surinam reclama el área entre los ríos Litani y Maruiní.
La capital la Guayana Francesa es Cayenne (Cayena en español), el idioma oficial es el francés, tiene una superficie de 89.150 km², 1.183 Km de fronteras y 378 de costas. La moneda es el euro y se encuentra en el huso horario UTC-3. Comprende varias islas costeras, como las islas del Salut, de las que la isla del Diablo es la más conocida, por su historia trágica como penal.
La Guayana Francesa es un territorio llano con pequeñas colinas. La máxima altura es Bellevue de l’Inini, de 851 metros. Se extiende sobre parte del escudo guayanés, y se diferencian, netamente, dos zonas, una faja costera llana y recubierta de sedimentos fluviales y arenas, y una región interior, compuesta por materiales granitos, gneis y arenisca, peniallanada. El relieve se eleva desde las tierras bajas de la costa, hasta las tierras altas del sur pasando por una meseta tabular, de transición, en el centro del país, en donde se combinan los granitos del escudo guayanés y los depósitos fluviales. En el extremo sur se encuentran las cadenas montañosas de Eureupoucigne y Oroye.
Los ríos son de escasa longitud y muy caudalosos. Surcan el territorio desde el interior, de sur a norte, hasta desembocar en el Atlántico. Los más importantes son el Mana, el Sinnamary, el Approuague y el Oyapock (u Oiapoque). Los ríos son decisivos como vía de comunicación con el interior. La región es pantanosa, y abundan las ciénagas, fruto de la planitud del norte del país, que dificulta el transcurrir de los ríos hacia su desembocadura. A diferencia del curso alto, donde se encajan en los granitos de la penillanura guayanesa, cerca de la costa los ríos se hacen lentos y meandriformes. En muchas ocasiones los aportes de sedimentos atoran los cursos fluviales y extienden el cauce fuera de los márgenes, dificultando la navegación.
El clima es ecuatorial lluvioso, cálido y muy húmedo todo el año, sin apenas variaciones. Su centro de acción principal es la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT), que canaliza los vientos alisios de este. Está libre, casi por completo, de los huracanes que se generan en el Atlántico. En general es un clima malsano, difícil de soportar. Aunque son raros el paso de los huracanes que se generan en el Atlántico, las violentas tormentas son muy frecuentes a lo largo de todo el año. Las temperaturas medias se sitúan en torno a los 27 ºC y las precipitaciones por encima de los 3.000 mm anuales.
La flora y la fauna son las propias del imperio biogeográfico y la ecozona neotropical. Se trata de un bosque tropical tropófilo, muy denso en cuanto nos alejamos un poco de la costa. Abundan especies como la caoba, palo santo, ébano verde, palo de rosa y multitud de maderas de gran calidad. La selva ecuatorial cubre 90% de su territorio. Los manglares cubren gran parte de la costa.
