Golfo de Tarento
El Golfo de Tarento forma parte del Mar Jónico. Se encuentra al sur de la península itálica, delimitado por la península salentina por el este y por la península calabresa por el oeste. En concreto, entre Punta Meliso de Santa Maria di Leuca y Punta Alice de Cirò Marina.
Es el golfo más grande de Italia, con una longitud máxima de 111 kilómetros y una extensión aproximada de 10.000 kilómetros cuadrados. El su parte central presenta una depresión conocida como el valle de Taranto, que alcanza una profundidad de 1.500 metros. En el interior del golfo se encuentran las Islas Cheradi, un pequeño archipiélago deshabitado de apenas 1,3 kilómetros cuadrados de superficie.
Tres de los cuatro lados del golfo están formados por las costas de tres regiones italianas: Puglia, Basilicata y Calabria. Esta configuración geográfica ha hecho que el estado italiano le haya dado a este golfo la consideración de mar interior.
El nombre del golfo proviene de la ciudad de Tarento (en la imagen), una antigua colonia griega en el sur de Italia, que es además el principal puerto de la región en el que viven unas 200.000 habitantes.
Precisamente en Tarento existe un brazo de mar qu ese interna en tierra firme a través del puerto de la ciudad. Se le conoce como Mare Piccolo (el mar pequeño), explotado tanto como zona de pesca como destino turístico. El resto del litoral del golfo se caracteriza por formar una linea costera poco accidentada, con más zonas bajas en su parte central y una mayor presencia de acantilados en los extremos.
Hacia el este solo destacan por una parte la minúscula península de Gallipoli, frente a la cual se encuentra la Isla de Sant»Andrea, así como la Laguna de Porto Cesareo, cerca de la cual están las islas costeras de Isola della Testa, Isola dei Conigli, Isola Grande e Isola della Malva.
Existe una corriente marina que recorre el perímetro del golfo en sentido de las agujas del reloj. La uniformidad de esta corriente se ve interrumpida por las aportaciones de los cursos fluviales y de los vertidos residuales procedentes del área urbana de Tarento.
Un aspecto curioso del Golfo de Tarento es la reclamación de Italia para que toda su extensión sea reconocida bajo la figura de aguas territoriales italianas. Al menos dos países, Estados Unidos y el Reino Unido, se han manifestado abiertamente en contra de esto. En espera de una resolución, las aguas del golfo permanecen cerradas desde hace años al tráfico internacional.