Etiopía: clima, flora y fauna
Debido a que la totalidad del territorio de Etiopía está ubicado en latitudes tropicales, sus regiones más llanas están sujetas a las condiciones climáticas típicas de la sabana o del desierto tropical. Sin embargo, el relieve juega un papel importante en la moderación de las temperaturas: las medias anuales en las tierras altas están sobre los 10ºC, mientras que la de las tierras bajas están en torno a los 30°C superior.
El calendario climático de Etiopía se divide en tres estaciones: la larga estación seca se prolonga desde septiembre hasta febrero; le sigue una corta temporada de lluvias, entre marzo y abril. El mes más caluroso y seco es mayo, que precede a la temporada de luvias (junio, julio y agosto).
Las temperaturas más frías se dan en diciembre o en enero, mientras que las más cálidas suelen ser en marzo, abril o mayo.
El régimen de precipitaciones es muy diferente según cada región: en las tierras altas del oeste llueve prácticamente todo el año, con cifras anuales de 2.000 mm. En cambio, en el este la cifra es menor (cerca de 1.400 mm al año). Las tierras bajas del este reciben lluvias dos veces al año, de abril a mayo y de octubre a noviembre, con dos períodos secos en medio.
La precipitación anual total varía entre 500 y 1.000 mm anuales. La región más seca del país es la llanura de Denakil, que recibe menos de 500 mm anuales, aunque en algunos años la precipitación es nula.
Flora de Etiopía
La vegetación natural de Etiopía está influenciada por cuatro biomas.
- La sabana, predominante en las partes más húmedas de las tierras altas occidentales y consistente en una vegetación tropical con bosques densos y exuberantes; en las elevaciones más bajas del altiplano occidental abundan los pastos y las llanuras secas
- Vegetación de montaña, que cubre las áreas más altas de las tierras altas del este y oeste.
- Estepa boscosa y bosque bajo del Valle del Rift y las tierras bajas del este.
- Estepa desértica, predominante en la llanura Denakil y los desiertos orientales.
Fauna de Etiopía
La vida silvestre de Etiopía ha sido históricamente muy rica y variada, aunque en la actualidad muchas de sus especies más características se han extinguido o se encuentran en peligro de extinción.
Leones, leopardos, elefantes, jirafas, rinocerontes y búfalos salvajes son hoy en día muy raros, especialmente en el norte de Etiopía, aunque existen grupos importantes en el valle del Rift, el valle del río Omo y las tierras bajas occidentales.
Entre los endemismos más importantes destacan el íbice walia, el chacal de Simien y el mono gelada. Otras especies típicas del país, aunque no exclusivas de Etiopía, son el orix (en la imagen superior), el kudu y el colobo blanco y negro. Aproximadamente el 5% del área total de Etiopía se encuentra protegido. El Parque Nacional de las Montañas Simien, hogar de varias especies en peligro de extinción, fue incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1978.