Geografía

Polonia: Población

Publicado por Santiago

Commons Wikimedia: Ortoimagen de VarsoviaPolonia tiene unos 39.000.000 de personas, lo que da una densidad demográfica de alrededor de 125 h/km². Se trata de una población que ya ha terminado la transición demográfica, en el período comunista. Durante mucho tiempo, no obstante, siguió manteniendo una tasa de natalidad relativamente elevada, por lo que no está tan envejecida como en el resto de Europa. Las tasas de natalidad bajas son muy modernas. El 15% de los polacos tienen menos de 15 años, el 72% entre 15 y 65 años y el 13% más de 65 años. A pesar de todo tiene pierde población, un -0,05% anual, debido a un saldo migratorio de -0,5‰. La tasa de natalidad es baja, sobre el 10‰, lo que da una tasa de fertilidad de 1,3 hijos por mujer. La tasa de mortalidad es muy baja, sobre el 10‰, y mucho más baja la tasa de mortalidad infantil, 7‰, como corresponde a un país en el que la sanidad alcanza a toda la población. La esperanza de vida al nacimiento es de unos 75 años.

En la composición demográfica de Polonia tiene un peso muy llamativo la segunda guerra mundial. Polonia fue el país con más bajas, tras la Unión Soviética. Además sufrió deportaciones forzosas tanto durante la guerra como durante el comunismo. De esta manera el 98% de la población es de origen polaco, con minorías poco significativas, y que además no fueron identificadas durante el período comunista, asimilando a toda la población como polacos. La minoría más numerosa es la alemana, aunque desde la caída del comunismo hay un intenso proceso de emigración hacia Alemania. El resto de las minorías procede de los antiguos países del bloque comunista.

La población en Polonia está desigualmente repartida. Katowice, Varsovia y Lodz son las regiones más pobladas, mientras que Suwalki, en el extremo nordeste, es la menos habitada. La población se concentra, especialmente, en torno a Silesia, la cuenca del Vístula, la región occidental y la costa del Báltico. Decrece, rápidamente, hacia las regiones cenagosas y boscosas del centro y el este. Silesia y la meseta subcarpática es la región minera por excelencia de Polonia, y una de las más productivas de Europa.

Polonia ha sufrido enormes procesos migratorios, muchos de ellos forzosos, debido a su historial de invasiones constantes, tanto por Alemania como por Rusia. Tras la segunda guerra mundial parte del territorio histórico de Polonia queda tras las fronteras de la Unión Soviética, mientras que por el oeste gana territorio a costa de Alemania. Se producen movimientos migratorios forzosos del este al oeste, los polacos a las nuevas tierras del oeste y los alemanes de esta zona a la República Democrática Alemana. Se calcula que unos 10 millones de personas fueron forzadas a migrar en este período. Como consecuencia de estos fenómenos la población se urbanizó rápidamente. Contrasta el índice de urbanización de las zonas afectadas por las deportaciones, muy superior a las de las regiones que no la sufrieron.

Las principales ciudades polacas son:

    * Varsovia, 1.707.566 h, voivoda de Mazowieckie

    * Cracovia, 755.192 h, voivoda de Malopolskie

    * Lodz, 743.898 h, voivoda de Lodzkie

    * Wroclaw, 631.154 h, voivoda de Dolnoslaskie

    * Poznan, 557.972 h, voivoda de Wielkopolskie

    * Gdansk, 453.404 h, voivoda de Pomorskie

    * Szczecin, 405.539 h, voivoda de Zachodnio-Pomorskie

Existen hasta 39 ciudades con más de 100.000 habitantes.

Polonia ha sido, históricamente, un país de emigrantes; especialmente durante la segunda mitad del siglo XIX. Se calcula que unos 15 millones de polacos y descendientes de polacos viven en el extranjero. La colonia más importante se radica en Estados Unidos, con dos tercios del total. Esta vocación migratoria se paró, drásticamente, durante el periodo comunista, debido a la imposibilidad de viajar. Con la caída del comunismo se recupera la tendencia migratoria, especialmente a causa de una economía muy deprimida. El principal destino, en esta ocasión, es la Unión Europea: Alemania, Francia y España. Desde la incorporación de Polonia a la Unión Europea la emigración cambia de naturaleza. Aunque sigue habiendo una alta emigración definitiva, se impone un modelo temporal, o emigración golondrina, en el que grandes contingentes de polacos salen a trabajar temporalmente en Alemania, Francia o España, especialmente en la épocas de recolección agrícola y la construcción.

Además de estos movimientos migratorios, Polonia también ha experimentado un notable crecimiento en el turismo. En 2019, el país recibió a más de 21 millones de turistas internacionales, lo que representa un aumento del 6% respecto al año anterior. Este crecimiento en el turismo ha contribuido al desarrollo económico del país, generando empleo y promoviendo la inversión en infraestructuras. Las ciudades más visitadas son Varsovia, Cracovia y Wroclaw, que atraen a los turistas con su rica historia, arquitectura impresionante y vibrante vida cultural.

En cuanto a la educación, Polonia cuenta con un sistema educativo sólido y bien desarrollado. El país tiene una tasa de alfabetización del 99,8%, una de las más altas del mundo. Además, la educación superior en Polonia es muy valorada, con más de 400 instituciones de educación superior y universidades que ofrecen una amplia gama de programas de estudio. La Universidad de Varsovia y la Universidad Jagellónica en Cracovia son dos de las instituciones más prestigiosas del país.

En lo que respecta a la religión, la gran mayoría de los polacos son católicos. La Iglesia Católica desempeña un papel importante en la sociedad polaca, influyendo en la educación, la política y la vida social. Sin embargo, también hay comunidades de protestantes, ortodoxos y judíos en el país.

En resumen, Polonia es un país con una rica historia y cultura, una población diversa y un fuerte sentido de identidad nacional. A pesar de los desafíos demográficos y económicos, el país ha logrado importantes avances en términos de desarrollo económico, educación y calidad de vida.