Nueva Zelanda: economía
Pese a contar con escaso peso a nivel mundial, la economía de Nueva Zelanda se distingue por su elevado grado de desarrollo. Desde sus orígenes ha estado marcada por su estrecho vínculo con el Reino Unido, y por tanto muy dependiente de sus altibajos.
En las últimas décadas, la economía del país se ha caracterizado por dos aspectos: por una parte, un progresivo cambio de modelo desde la exportación de productos agrarios hacia el desarrollo del sector terciario, y por otra parte, la aplicación de un sistema de libre comercio con muy pocos impuestos y trabas administrativas.
El subsuelo neozelandés es rico en diversidad de minerales, aunque pocos de ellos se encuentran en cantidades suficientes para permitir su explotación comercial.
Existen yacimientos relativamente modestos de oro, carbón, hierro y gas natural, cuyos recursos se destinan mayoritariamente al consumo interno.
Agricultura y ganadería
La base agrícola de Nueva Zelanda se basa en una agricultura de pastoreo extensivo de ganado ovino y producción de leche a gran escala, aprovechando el clima templado de estas tierras y una gestión altamente tecnificada.
Tradicionalmente, Nueva Zelanda ha producido y exportado lana y productos lácteos. Las principales razas de vacas y ovejas, así como los pastos y fertilizantes, fueron introducidos en el país desde Europa.
Como dato curioso, hay que destacar que en Nueva Zelanda hay cerca de 28 millones de cabezas de ganado ovino, es decir, aproximadamente siete ovejas por cada ser humano.
La viticultura también ha experimentado un importante desarrollo en las últimas décadas. En la actualidad los vinos de Nueva Zelanda se cuentan entre los mejores del mundo. La silvicultura, aunque ha perdido parte de su peso original, sigue siendo también una actividad importante.
Industria y comercio
El aislamiento geográfico de Nueva Zelanda obligó al país a desarrollar una industria propia dedicada a la fabricación y reparación de maquinaria agrícola. Hasta la década de los años 70 las industrias manufactureras estuvieron protegidas por el Estado, pero dejaron de ser competitivas por lo que se debió cambiar el modelo económico que favoreció la importación y redujo el número de plantas industriales en el país.
En la actualidad la industria maderera y de procesamiento de alimentos son las más destacadas dentro del sector secundario.
Las principales exportaciones del país consisten en productos agrícolas (carne, productos lácteos , frutas y verduras) y, en menor grado, también productos forestales (madera y papel).
En cuanto a las importantes, hay que señalar sobre todo petróleo crudo y refinado, maquinaria y vehículos. Los principales socios comerciales de Nueva Zelanda son, por razones geográficas, Australia, China, Estados Unidos y Japón. En el año 1983, el Acuerdo Comercial de Relaciones Económicas Estrechadas de Australia y Nueva Zelanda (CER) decretó la supresión de aranceles y cuotas para el comercio de productos básicos entre ambos.