Efectos de las nuevas tecnologías sobre el espacio geográfico
Hemos visto cómo las nuevas tecnologías tienen un impacto es en el espacio geográfico, lo que constituye un campo de estudio interesante para la Geografía. En este artículo abordaremos cuáles son los efectos de estas tecnologías sobre el espacio geográfico, de una manera global, sin olvidar que cada una de las nuevas tecnologías tiene impactos diferentes.
El primer impacto sobre el espacio geográfico de las nuevas tecnologías tiene que ver con los desplazamientos y su relación tiempo-distancia. Cuando la velocidad los medios de transportes era similar, independientemente de su comodidad, la distancia y el tiempo que se empleaba en recorrerla eran valores similares, pero con los nuevos sistemas de transporte y la nuevas vías, que pueden ser más o menos rápidas, la distancia real ha dejado de medirse en kilómetros para hacerlo en tiempo. A fin de cuentas lo importante no era la distancia objetiva sino el tiempo que nos llevaría recorrerla y eso dependerá de la «resistencia» a la movilidad que ponga el espacio.
Las nuevas tecnologías, especialmente las telemáticas, anulan la relación tiempo distancia, especialmente para la transmisión de información. Cualquier punto del planeta es accesible a la información prácticamente al unísono, y pasando por los satélites que orbitan el planeta. Una de las consecuencias que tiene esta la «eliminación» del espacio en la transmisión de la información es que sobre un mismo suceso se pueden aplicar análisis en escalas muy diferentes, dependiendo de dónde esté ubicado el receptor.
Los objetos materiales también han reducido la resistencia del espacio a la hora del transporte gracias a los trenes de alta velocidad, las autopistas rápidas, la aviación, etc. Aunque están sujetos a análisis clásicos de relación tiempo-espacio.
Otro de los cambios que introducen las nuevas tecnologías es el cambio en la función del espacio. Podemos considerar cuatro funciones básicas: soporte de las actividades, condicionante físico de las actividades, recurso y medio de producción. Cada punto del espacio puede asumir una sola función, excluyendo a las demás en cuanto se define una de ellas. Aunque es posible que un mismo punto pueda tener diferentes funciones de manera sucesiva. Las nuevas tecnologías permiten el cambio de función de un lugar del espacio, especialmente cuando puntos que no lo eran se convierte en recurso y en soporte de actividades. De esta manera, se pueden localizar actividades humanas en lugares en los que la tecnología precedente no lo permitía, o relocalizar actividades que anteriormente sólo podían ubicarse en ciertos puntos del espacio geográfico, y que las nuevas tecnologías permiten la independencia de los factores de localización clásicos.
Este cambio de funciones del espacio nos lleva a considerar la creación de espacio geográfico, es decir, las nuevas tecnologías ponen al alcance lugares que antes no eran accesibles para el desarrollo de las actividades socioeconómicas. Son muy llamativos los nuevos usos terciarios que aparecen en el mundo rural, con una densidad de población muy baja. En definitiva, las nuevas tecnologías amplían el espacio geográfico disponible y, a la postre, lo ordenan.
Una de las cuestiones clásicas de la Geografía es la división espacial. Las nuevas tecnologías también tienen un impacto en esta cuestión, muchas veces subvirtiéndola. No sólo se trata de que la información circule por «encima» de las fronteras, también el cambio de función del espacio hace necesario una remodelación de las divisiones clásicas. El aumento de la productividad de las fábricas, gracias a las nuevas tecnologías, hace que los mercados nacionales se queden pequeños, por lo que se tiende a crear zonas internacionales de libre comercio, para dar salida a esas mercancías. Esto implica armonizaciones en la cualificación de los trabajadores, su sueldo y sus derechos. Todo ello nos lleva a considerar una organización de la producción y el trabajo de ámbito mundial. La globalización, tal y como se entiende hoy en día, es posible sólo gracias a las nuevas tecnologías.
Un efecto posible del impacto de las nuevas tecnologías sobre la ubicación de la industria puede venir de la mano de la robotización. En la actualidad muchas empresas buscan la mano de obra barata de los países pobres para localizar sus plantas de producción, debido a que el transporte es muy barato, pero si la automatización de las tareas productivas llegan a bajar al mínimo la necesidad de mano de obra (que además habrá de ser muy cualificada) las empresas podrían replantearse su ubicación, y situarse cerca de los centros de decisión, en los países ricos. Habrá que ver si los países en desarrollo son capaces de retener esta actividad industrial con algún tipo de ventaja.
En la actualidad es posible determinar el grado de desarrollo de los países en función del grado de tecnología que aplican en su proceso productivo.
Las transformaciones del espacio geográfico conllevan cambios en la articulación y jerarquización del espacio; y como consecuencia en la estructura social de los países. Las tendencias son contradictorias, ya que las nuevas tecnologías permiten tanto la concentración como la desconcentración de las actividades socio-económicas, incluso no está claro si tienden a la centralización, a causa de que las nuevas tecnologías están en manos de unos pocos, o hacia la descentralización, a causa de que las nuevas tecnologías son más baratas y hacen la producción accesible a más personas. Estas son cuestiones de estudio para la Geografía en el futuro.