Suecia: Economía
A pesar de su poca población Suecia es uno de los países más ricos del mundo. Su índice de desarrollo humano es de los más altos del mundo (0,956). Suecia es el paradigma del Estado del bienestar y las políticas socialdemócratas que intervienen en el mercado para regularlo y corregir los desequilibrios. No es, pues, una economía liberal pura. La intervención pública permite un reparto de la riqueza mucho más homogéneo que en la mayoría de los países, y el mercado la creación de riqueza para todos.
La economía sueca es esencialmente de servicios. La agricultura aporta el 1,5% de PIB y acoge al 2% de la fuerza laboral, la industria supone el 28,5% del PIB y el 24% de los trabajadores, y los servicio son el 70% del PIB y el 74% de la población activa.
Los recursos de la economía sueca están muy condicionados por su clima. Suecia es uno de los países de Europa con menos porcentaje de superficie cultivada, debido a las dificultades del clima, y la escasa vegetación natural. A pesar de que usa todos los avances de la revolución verde es un país deficitario. La ganadería es algo más pujante gracias a la estabulación y a la producción intensiva de la cabaña avícola. La producción silvícola, por el contrario, es mucho más importante. La mitad del país está cubierta de bosques, y su explotación aporta mucho dinero a la economía sueca, especialmente por la elaboración de muebles. La caza es, también, un recurso importante para la economía sueca.
La industria sueca es muy efectiva. Su principal recurso es el hierro, que se extrae en la mina de Norland, en el norte, por una empresa pública (LKAB). Esta mina es famosa por ser la mina de hierro más grande del mundo y por tener la entrada en el centro de la ciudad. Gracias a esta mina se desarrolla una importante industria del automóvil y naval. En Suecia también hay una importante industria electrónica, informática y de nuevas tecnologías. El Estado sueco promueve la investigación y explota varias patentes que han salido de sus centros de investigación.
Los servicios son mucho, variados y de calidad. Apenas existe servicios personales de baja calidad. Destaca el comercio, tanto interno como externo, ya que la sociedad sueca tiene un alto grado de consumo, aunque insuficiente para la potencia de su industria, y depende del comercio exterior. Los principales socios comerciales de Suecia son el resto de los países de la Unión Europea, los países escandinavos y Rusia. El turismo es escaso, aunque de calidad. Destaca en los deportes de invierno que se practican durante los meses de verano.
Las comunicaciones son muy difíciles, debido al clima y el relieve, pero es muy densa la red de carreteras y ferrocarriles en el sur, entre la costa este y la oeste, disminuyendo su densidad hacia el norte. Las principales vías de comunicación se encuentran en torno a las principales ciudades del país, con unas pocas buenas vías que las conectan. Los puertos y la red de canales y ríos internos completan la red de comunicaciones.
Suecia tiene varias multinacionales, como Volvo, Saab, Scania, Ericsson o Ikea, además de otras menos conocidas debido a que su mercado son otras industrias de equipo. Esto a pesar de una presión fiscal muy grande que es la que permite sostener el Estado del bienestar, y una correcta distribución de la riqueza creada, en buena medida, por el Estado. Esto permite que en Suecia no existan bolsas de miseria en ninguna capa de la sociedad.