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Brasil: vegetación

Publicado por Santiago

Commons Wikimedia: Bosque ecuatorial amazónico (Brasil)La flora y la fauna de Brasil está dominada por el bosque ecuatorial amazónico, la hylea, pero reducir la vegetación de Brasil a este bosque es un error, pues deja fuera a formaciones vegetales de gran originalidad e importancia. En Brasil la flora y la fauna son las propias del imperio biogeográfico y la ecozona neotropical.

En Brasil existe una gran diversidad de formaciones vegetales asociadas a diferentes tipos de suelos, relieves y climas. Se pueden distinguir las siguientes formaciones vegetales:

La hylea, o bosque amazónico

La hylea, o bosque amazónico, ocupa el 38,5% del territorio. Dependiendo de sus características se pueden distinguir: zonas de tierra firme, zonas de igapó (húmedas) y zonas de cultivo.

Las zonas de tierra firme son las más altas y alejadas de los ríos, aquellas que están libres de sus inundaciones, aun en las mayores avenidas. En la vegetación predominan los grande árboles, que pueden alcanzar de 60 a 65 metros. Sus copas forman un tupida bóveda que dificulta la llegada de los rayos del sol al suelo. Es capaz de retener hasta el 95% de la iluminación. El interior de la floresta es oscuro, mal ventilado y húmedo. Tiene especies de animales en todos los pisos del bosque, incluso especies vegetales que se desarrollan por completo en el estrato superior de los árboles. Sus principales especies son la castanheira-do-pará, el caucho, el guaraná y el timbó.

Las zonas de igapó están permanentemente anegadas. Se encuentran en los terrenos más bajos y próximos a los ríos. El exceso de agua hace del suelo un medio asfixiante y poco propicio. Los árboles pueden medir hasta 20 metros, pero lo normal es que no alcancen más de tres, con ramificaciones bajas y densas, de difícil penetración. La especie más importante es la vitória-régia.

Las zonas de cultivo se localizadas entre la tierra firme y las zonas húmedas. El tipo de suelo varía es función de la mayor o menor proximidad a los ríos. Se inundan ocasionalmente, ya que están sobre el lecho mayor. Predominan los árboles de gran porte, como la seringueira (Hevea brasilensis), productora de caucho, las palmeras y el jatobá.

El bosque tropical

El bosque tropical se extiende a lo largo de todo el litoral y la región Sudeste. Es un bosque que ha sufrido mucho el impacto de la actividad humana, ya que esta es la zona más habitada del país. Las especies son semejantes a las de los bosques amazónicos, pero predominan las más adaptadas a los cambios de temperatura y humedad, a medida que se alejan de la línea ecuatorial. En altitudes superiores a los 800 metros retienen la humedad provenientes del océano Atlántico. No obstante, los árboles no llegan a superar los 30 metros de altura. La parte de las sierras del litoral es conocida como «mata Atlântica». Las especies principales son: ipês (rojo, blanco, amarillo), imbaúba, palmito, canelas y cedro.

El bosque de araucaria

El bosques de araucaria se extiende por las regiones montañosas del sur, con estaciones bien diferenciadas: verano caliente e invierno riguroso. La especie principal es el pino del Paraná, que pueden alcanzar de 25 a 30 metros, con hojas en forma de aguja, tanto para no retener la nieve y como para no evaporar agua en la época del estiaje. No es un bosque cerrado, por lo que en su sotobosque crece la hierba-mate.

El bosques de cocai

El bosques de cocai se encuentran es la zona de transición entre la floresta amazónica y la caatinga. Predominan las palmeras, con dos especies principales: babaçu y carnaúba, y asociadas a estas dos aparecen el buriti y la buritirana.

La caatinga

La caatinga es una formación boscosa abigarrada, en la que sus árboles tienen troncos gruesos, tortuosos y con espesas cortezas, hojas gruesas y con espinos. La palabra, de origen tupí, significa «mata blanca», ya que sólo se presenta verde durante el corto período de las lluvias de invierno. La vegetación de caatinga posee la capacidad de perder las hojas para retener el agua.

El pantanal

El pantanal se extiende por cerca de 150.000 km² al sudoeste, desde Mato Grosso do Sul hasta Paraguay. En el pantanal se alternan las épocas de inundaciones y las de sequía, gracias a ello existe una vegetación muy diversificada. Se encuentran especies típicas de la hylea, de las zonas húmedas, de los llanos y de la caatinga. En el área que se inunda crecen gramíneas durante el período seco. Por encima del nivel de las inundaciones crecen árboles tortuosos y de cortezas gruesas. En las áreas encharcadas se asienta la vitória-régia y la tabua.

El bosque de cerrado

El bosque de cerrado se asienta en regiones con mucha agua en el subsuelo y dos estaciones muy definidas, una seca y otra lluviosa. Tiene árboles y arbustos de ramas tortuosas, corteza gruesa, hojas cubiertas por pelos y raíces muy profundas. En la estación seca parte de sus árboles pierden las hojas. Esta disponibilidad de agua en el subsuelo es lo que le diferencia de la caatinga.

El campo

El campo se extiende por el extremo sur de Brasil. También se conoce como Campanha Gaúcha. Se trata de grandes formaciones de gramíneas. En la orilla de los ríos se desarrollan abigarrados bosques galería.

El manglar

Los manglares se encuentran en las desembocaduras de los ríos en el océano Atlántico. Se caracterizan por los suelos anegados, movedizos y poco aireados. Sus raíces se ramifican desde el tronco en dirección a tierra firme para mejorar su fijación.

La restinga

La restinga es la vegetación típica de los terrenos arenosos y salinos del litoral, está formada por plantas herbáceas y arbustivas.

La naturaleza brasileña, a pesar de que en gran parte de su territorio sigue siendo muy poco conocida, viene sufriendo el impacto de la explotación humana. El Amazonas, desde hace mucho tiempo, sufre incendios, destinados a ampliar los pastos y la superficie agrícola para las plantaciones. La explotación silvícola no respeta los criterios de sostenibilidad, debido a que, por la propia estructura del bosque ecuatorial, los individuos de cada especie se encuentran muy dispersos, y es necesario arrasar grandes cantidades de bosque para que la explotación sea rentable. Otro de los ataques a los que se enfrenta el bosque amazónico es la deforestación para promover la explotación minera, de gran riqueza y poco conocida. No obstante, el 67% del territorio nacional se encuentra cubierto de vegetación primitiva.

Commons Wikimedia: Mapa de vegetación en Brasil