Tipos de lagos
Una vez estudiadas las características de los lagos afrontamos ahora sus tipología.
Dependiendo de su origen tendremos diferentes clases de lagos:
Lagos tectónicos. Los lagos tectónicos se alojan en las depresiones que se forman con los movimientos estructurales del relieve: plegamientos, fallas, graben, cuencas monoclinales, etc. Estas depresiones se interponen en el curso de un río y embalsan sus aguas hasta que encuentran un punto por el que se desbordan formando un río emisario. Este mecanismo actúa en todos los tipos de lagos excepto en los endorreicos.
Lagos glaciares. Estos son los más abundantes en el mundo. Su origen se debe a la sobreexcavación de la roca que produce el hielo dentro de los grandes glaciares. Cuando este hielo desaparece la hondonada es ocupada por un lago.
Lagos cársticos. Son lagos que se alojan en una depresión cárstica: dolina, uvala, poljé, que se ha producido por la disolución de las calizas. En la mayoría de estos lagos tanto la alimentación de los ríos afluentes, como el río emisario, se hace gracias a ríos subterráneos.
Lagos sobre depresiones de rocas metamórficas. Este tipo de lagos son más raros, y por lo general no tienen mucha extensión pero cuando la erosión, en las penillanuras construidas sobre granitos o gneis, forma una depresión allí se aloja un lago poco profundo.
Lagos de cráter. Los lagos de cráter son los que se alojan en el interior de un cono volcánico, o de una caldera volcánica. Tienen una forma llamativamente circular, y no son muy extensos. La alimentación es muy poca, hay que se limita a las aguas que caen directamente en el interior del cráter, y posiblemente a el agua exudada por las rocas volcánicas. No tienen río emisario, y se evaporan poco antes de una erupción.
Lagos de meandro. La dinámica de los ríos en las llanuras fuerza a las aguas a adoptar un curso meandriforme. Cuando el meandro es muy pronunciando, y especialmente tras una avenida que recupera un curso más recto, quedan abandonados meandros que forman un lago.
Lagos endorreicos. Estos son lagos que se instalan sobre depresiones de la superficie terrestre que no tienen salida, por lo que forman una pequeña cuenca hidrográfica.
Lagos pelágicos. Se llaman lagos pelágicos a aquellos que son restos de antiguos mares que se han desecado y sólo queda cubierta de agua la zona más profunda. Son lagos muy salados.
Lagos de barrera. Dentro de los lagos de barrera tenemos varios tipos:
- Barreras morrénicas. Estos lagos están vinculados específicamente a los grandes glaciares activos, o en los que la erosión no ha desmantelado los depósitos morrénicos. Se forman frente a la lengua glaciar, cuando esta se retira y deja abandonada delante de ella una morrena frontal. Esa morrena es lo suficientemente densa como para atrapar las aguas de fusión del glaciar.
- Barreras de coladas volcánicas. La coladas volcánicas pueden interponerse en el curso de las aguas, generando un lago detrás de ellas. Las coladas en cordón tienen una estructura que favorece la formación de lagos. El frente de estas coladas llega a tener una contra pendiente que dificulta la evacuación de las aguas, creando un lago.
- Barreras fluviales. La acumulación de sedimentos en determinadas partes del río, especialmente en el curso bajo, aísla determinadas zonas donde se instala un lago.
- Barreras de arena. La dinámica del litoral genera la formación de barreras de arena tras las cuales se forma un lago. Estos lagos se llaman específicamente marismas y albuferas, a las que, por sus características singulares, les dedicaremos un artículo.
- Barreras biológicas. Estos lagos son más raros pero también existe. Se forman donde existen colonias de castores que taponan el curso del río acumulando ramas en un estrecho, con lo que tras ellas se forma un lago.
Lagos artificiales. Los lagos artificiales son los creados por el ser humano para sus necesidades. Los hay muy antiguos pero los más característicos son los pantanos, o embalses, retenidos tras una presa artificial que se coloca en un estrecho del terreno.