Montenegro: Geografía humana
Montenegro tiene unos 690.000 habitantes, lo que da una densidad de población de unos 50 h/km². Se trata de una población moderna que terminó la transición demográfica durante el período comunista. Sus ciclos demográficos se corresponden con los de Yugoslavia, y la población ha sufrido las guerras que han azotado a la zona a finales del siglo XX y principios del XXI. Su población está compuesta, sobre todo, por montenegrinos y serbios, pero existen minoría procedentes de todas las antiguas repúblicas yugoslavas.
Montenegro tiene una población joven para lo normal en Europa. El 16% de la población tiene menos de 15 años, el 70% entre 15 y 65 años, y el 14% tiene más de 65 años. La población decrece, a ritmo de -0,8% anual, debido a un saldo migratorio negativo y una tasa de natalidad baja, del 11‰, lo que da una tasa de fertilidad de 1,4 hijos por mujer. La tasa de mortalidad es baja, sobre el 8‰, y la tasa de mortalidad infantil también es baja, como en su vecina Serbia está sobre el 6‰. La esperanza de vida al nacimiento es de unos 74 años.
La población se reparte más o menos uniformemente por todo el país, aunque hay un predominio de la población urbana. Las principales ciudades montenegrinas son:
* Podgorica, 145.192 h, municipio de Podgorica
* Niksic, 58.712 h, municipio de Niksic
* Pljevlja, 21.354 h, municipio de Pljevlja
* Bijelo Polje, 15.357 h, municipio de Bijelo Polje
* Bar, 15.112 h, municipio de Bar
La economía de Montenegro está, aún, muy relacionada con la de Serbia, y de los ciclos de la antigua Yugoslavia. Se trata de una región medianamente industrializada, aunque con un sistema productivo obsoleto.
La agricultura apenas produce para el mercado, y en todo caso es para un mercado local. Buena parte de ella es de autosuficiencia. Las regiones agrícolas por excelencia son las llanuras del interior del país, y las planicies de los ríos. Sus principales cultivos son el maíz, la avena, las patatas, la cebada, el trigo, etc. La ganadería se concentra en las muchas montañas, aunque también tiene un fuerte carácter familiar y de subsistencia.
Destaca en al generación de energía eléctrica, la minería: bauxita, cromo, manganeso, plomo, cinc, cobre, y en los recursos forestales y el textil.
Las comunicaciones son lentas y difíciles. La guerra destruyó muchas de las infraestructuras y la crisis está impidiendo la reconstrucción.
Fue en tiempos de la Yugoslavia una región turística, debido a sus lagos y a su costa, pero en la actualidad es un destino poco apetecible, por lo que no ha despegado como destino turístico.
Las sanciones de la ONU a Serbia y Montenegro y la administración de la Misión de la ONU han provocado una profunda crisis de la que le está costando mucho salir. Se trata de un país pobre dentro de Europa, con un índice de desarrollo humano de 0.822, alto para el mundo, bajo para Europa. Gran parte de la población montenegrina está bajo la línea de la pobreza. Por su posición en el mar Adriático, cerca de Italia y los pocos controles en la frontera con serbia se convirtió en un centro de contrabando en el que la economía sumergida soluciona muchos de los problemas del país. Por su debilidad económica el euro es la moneda de uso en el país. Su economía está en pleno proceso de reconstrucción y apenas hay datos fiables, debido a los convulsos acontecimientos históricos y políticos que ha sufrido el país.