Geografía

Portugal: población

Publicado por Santiago

Commons Wikimedia: Vista aerea de LisboaPortugal tiene una población de unos 11.400.000 habitantes, lo que da una densidad demográfica de unos 125 h/km², mucho más alta que la media del resto de la península ibérica.

Portugal es un país moderno que se encuentra en el inicio del ciclo moderno de población por lo que se está envejeciendo rápidamente. La estructura por edades arroja un 16% de menores de 15 años, un 66% entre 15 y 65, y un 18% de mayores de 65 años. El crecimiento de la población es muy bajo, en torno al 0,3% anual, con una tasa de natalidad del 10‰, una tasa de fecundidad de 1,5 hijos por mujer, una tasa de mortalidad general del 10‰, y una tasa de mortalidad infantil muy baja del 5‰.

La distribución de la población en Portugal presenta importantes diferencias entre el norte y el sur, y entre la costa y el interior. La costa y el norte presenta densidades de población notablemente superiores a las del resto del país. Regiones como las de Lisboa y Oporto superan los 600 h/km², mientras que Braganza, Portoalegre, Évora o Beja apenas superan los 3 h/km². Estas diferencias se acentuaron durante la década de 1960, cuando un auténtico éxodo rural despobló las regiones próximas a la frontera con España. Las áreas de atracción interior son los núcleos industriales y los turísticos: Lisboa, Oporto, Setúbal, Aveiro, Braga, Faro y el Algarve en general como principal destino turístico.

Portugal no es un país de grandes ciudades, existen gran cantidad de ciudades medias de entre 10.000 y 50.000 habitantes. Las principales ciudades portuguesas son:

    * Lisboa, 491.888 h

    * Porto, 240.773 h

    * Amadora, 181.179 h

    * Braga, 128.138 h

    * Setúbal, 120.636 h

    * Queluz, 116.309 h

    * Coimbra, 109.868 h

    * Agualva-Cacém, 105.249 h

    * Funchal, 95.076 h

    * Algueirão-Mem Martins, 85.364 h

    * Vila Nova de Gaia, 72.441 h

    * Loures, 66.283 h

    * Rio de Mouro, 62.471 h

    * Corroios, 57.687 h

    * Aveiro, 56.712 h

    * Odivelas, 55.409 h

    * Amora, 54.474 h

    * Rio Tinto, 52.327 h

La historia de las migraciones en Portugal es muy intensa. Se remonta a los tiempos del imperio, cuando de Portugal salían para sus posesiones ultramarinas miles de personas, pero también fue tierra de acogida durante esos siglos, gracias a su poderío económico. Desde mediados del siglo XIX hasta mediados del siglo XX Portugal ha sido un país de emigrantes, cuando llegaron a vivir fuera el país casi dos millones de portugueses. Brasil fue el destino principal durante el siglo XIX y hasta la primera guerra mundial. A partir de la segunda guerra mundial fue la Europa central la que acogió a los emigrantes portugueses: Francia y Alemania, principalmente. Son el norte del país, y las regiones de frontera con España las zonas que más emigrantes aporta en esta época. Durante esos años las remesas de dinero que aportaban los emigrantes fueron un factor de desarrollo importantísimo para Portugal.

La emigración se detiene a partir de la crisis del petróleo de 1973, e incluso comienzan los retornos. En esta época la pérdida de las colonias africanas provocan un repentino aumento de la población, tanto de portugueses que se habían asentado en ellas como de población local que emigra de sus países tras la independencia. Son inmigrantes que se asientan en Lisboa y las regiones del litoral, principalmente.

Tras la incorporación de Portugal a la Unión Europea en 1986 comienza el despegue económico del país, hasta convertirse en uno de los 15 más ricos del mundo. Gracias a esta prosperidad Portugal, en la actualidad recibe grandes contingentes de inmigrantes. Tiene un saldo migratorio de 3,2‰. El origen de esta inmigración es el norte de África, sus antiguas colonias (Mozambique, Angola, Cabo Verde, Timor, etc.) y Brasil.