Geografía

Humedales

Publicado por Pablo Guerrero

Se llaman humedales a los suelos de zonas que sufren inundaciones temporarias, debido al afloramiento de la napa freática o a la escasa permeabilidad. Los humedales se caracterizan por la presencia de agua, cuyo rol es fundamental para la estructura y el desarrollo de la ecología de este ecosistema.

El predominio del agua diferencia los humedales de los ecosistemas terrestres, en especial en la variabilidad de tiempo y espacio. Esta característica es fundamental para la ecología del humedal, ya que las especies tienen que adaptarse a largos períodos de sequía y de inundación.

Varios criterios definen los humedales, algunos basados en principios ecológicos y otros orientados hacia el manejo. La Convención de los Humedales los define como extensiones de turberas, marismas y pantanos, o cualquier otra superficie cubierta de agua, ya sea natural o artificial, temporal o permanente, corriente o estancada, salobre, dulce o salada (incluso las aguas marinas de profundidad menor a los seis metros en marea baja).

En los humedales, los procesos ecológicos e hidrológicos que se generan son variados y estos dan origen a una amplia biodiversidad. Uno de los procesos hídricos que se presenta en los humedales es la recarga de acuíferos que tiene lugar cuando el agua desciende hasta las napas freáticas. En cuanto a las funciones ecológicas del humedal, estos disminuyen las inundaciones y la erosión de las costas, y aportan movilidad y retención a los nutrientes y contaminantes que conforman las aguas.

Los humedales son hábitats de una gran diversidad biológica y, en algunos casos, protegen a especies en peligro de extinción. Inclusive, debido al alto nivel de producción, son hogares de numerosas poblaciones.

La conservación de los humedales también es importante para el hombre, ya que algunas actividades humanas se sustentan gracias a estos ecosistemas. Entre las actividades más frecuentes en estos parajes se encuentran la pesca, la recreación, la forestación, la agricultura, el pastoreo y el turismo, entre otros. También se caracterizan por ser un gran aporte de agua dulce, tanto para la industria como para el consumo humano, factor que otorga a la preservación de los humedales un lugar prioritario si se tiene en cuenta la proyección para los próximos años de escasez de agua limpia, proveniente de ecosistemas sanos.

Hoy los humedales son considerados espacios primordiales de conservación, pero a lo largo de la historia, algunos de estos territorios fueron drenados para recuperar las tierras con el objetivo de generar urbanizaciones o áreas de agricultura. Estos espacios sufren diariamente modificaciones, consecuencia de la intervención del hombre en el ambiente al construir canales y represas, o al trabajar en zonas cercanas a las costas de los humedales y extraer agua o incorporar nutrientes, sedimentos o contaminantes. Es importante considerar que, dadas las características dinámicas de los ambientes lóticos, diferentes partes del ecosistema se ven afectadas por circunstancias producidas aguas arriba. Un resultado muy frecuente de estos hechos es la contaminación. También, las especies migratorias sufren los cambios de las condiciones naturales de los cursos de agua.