El tepuy
El tepuy, también escrito tepui, es una forma de relieve típica del nordeste de Sudamérica, en concreto en el norte de Brasil, Guyana y, sobre todo, Venezuela, donde se encuentran el 85 % de los tepuyes conocidos.
Se trata de una meseta alta de cuarcita, arenisca y pizarra que presenta una forma muy peculiar, con paredes verticales y una cima generalmente plana o ligeramente ondulada.
Este tipo de montaña está considerada una de las más antiguas del planeta, con entre 2 y 4 millones de años de antigüedad.
Es bastante habitual encontrar cursos de agua que nacen sobre las cimas de estos tepuyes, lo cual da lugar a gigantescas cataratas como la del Salto del Ángel, la cascada más alta del mundo.
La palabra tepuy (cuyo significado es simplemente «montaña») procede de la lengua pemón, hablada por algunas tribus indígenas venezolanas.
Monte Roraima
Es el tepuy más grande que se conoce (el de la imagen que encabeza el post). Con una altura de 2.810 metros, no es el más alto, ya que lo supera el Pico Neblina, pero sí el tepuy más masivo de la región. Se localiza en la triple frontera entre Venezuela, Brasil y Guyana.
El Monte Roraima fue el primero de los grandes tepuyes en ser escalado, en concreto en el año 1884. Su imponente siluete sirvió también de inspiración al escritor Arthur Conan Doyle para su clásica novela de aventuras El mundo perdido.
Otros tepuyes importantes
Existen cientos de tepuyes catalogados en la selva venezolana, aunque se sospecha que podría haber muchos más, aunque de menor tamaño, los cuales podrían permanecen ocultos bajo la espesura. Estos son los más destacados:
- Pico Neblina (2.995 m), el tepuy más alto de América, situado sobre la frontera entre Brasil y Venezuela.
- Cerro Duida (2.700 m), que forma parte de la cordillera de Sierra Parima.
- Kukenán (2.680 m), en la imagen superior, cuya cima se considera la más inaccesible.
- Auyan-Tepuy (2.535 m), famoso por albergar en sus laderas la catarata del Salto del Ángel (en la imagen inferior).
- Cerro Marahuaca (2.382 m), ubicado en una zona apenas explorada.
- Sarisariñama (2.300 m).
Flora y fauna
Las cimas de estas montañas-meseta se encuentran completamente aisladas de la selva que las rodea, lo cual determina la existencia en ellas de un clima propio, más húmedo pero menos caluroso.
En algunos tepuyes, como por ejemplo el Pico Neblina, las cimas se encuentran permanentemente cubiertas de nubes.
El aislamiento está propiciado no sólo por la altitud, sino también por las altas paredes verticales. El resultado es la presencia de numerosos endemismos vegetales como por ejemplo la heliámphora, una peculiar especie de planta carnívora.
Entre las especies animales más destacadas cabe mencionar el oso hormiguero, el jaguar, la nutria gigante, el armadillo gigante, el halcón palomero o el colibrí. Son abundantes los reptiles, entre ellos la boa constrictor y la anaconda.