Los Vosgos
Los Vosgos son un macizo montañoso del noreste de Francia que separa la meseta de Lorena de la llanura de Alsacia. Su punto más elevado es el Grand Ballon (imagen inferior), que se eleva a una altura de 1.424 metros sobre el nivel del mar.
Todo el macizo se caracteriza por presentar fuertes pendientes en el lado alsaciano (al este), mientras que el lado de Lorena (oeste) tiene una pendiente más suave. Esta geomorfología produce un efecto foehn que hace que la llanura alsaciana se beneficie de un clima más soleado y seco que la meseta de Lorena.
Las crestas de los Vosgos sirvieron para marcar la frontera franco-germana del año 1871, que dejaba la región vitícola de Alsacia y parte de Lorena en territorio alemán.
El origen etimológico de la denominación Vosgos no está claro, aunque parece ser de origen germánico. Por otra parte, el término «ballon» que se usa para nombrar a algunas de las mayores elevaciones del macizo podría deberse a que sus cimas presentan formas redondeadas a causa de la erosión, siendo poco verticales.
Este macizo suele dividirse en tres grandes secciones:
- Vosgos del norte, que se prolongan más allá de la frontera alemana, formando parte de la reserva de biosfera transfronteriza Vosges du Nord-Pfälzerwald. Sus picos principales son el Grand Wintersberg (581 m), el Petit Wintersberg (573 m), el Mohnenberg (547 m) y el Maimont (513 m).
- Vosgos centrales, cuyas principales alturas son el Pico de Mutzig (1.010 m), el Donon (1.009 m), el Narion (999 m), el Noll (991 m) y el Grossmann (987 m).
- Altos Vosgos, ubicados más al sur, dentro de los límites del Parque natural regional Ballons des Vosges. Aquí se encuentran las máximas elevaciones del macizo: el Grand Ballon (1.424 m), el Storkenkopf (1.366 m), el Hohneck (1.363 m), el Kastelberg (1.350 m) y el Klintzkopf (1.330 m).
Clima, flora y fauna
El macizo de los Vosgos está sujeto a una doble influencia: oceánica y semi-continental.
Entre sus principales características climáticas cabe destacar en primer lugar temperaturas invernales muy bajas y frecuentes nevadas. Las precipitaciones son más abundantes en el lado occidental de la cordillera.
En las zonas más elevadas domina un clima duro de tipo alpino. Sin embargo, en las laderas las condiciones son más benignas y permiten el cultivo de la vid y otras plantas.
La vegetación del macizo está dominada por coníferas, hayas y robles. Junto a los grandes bosques se extienden grandes zonas de pastos. Una de las plantas más características de los Vosgos es el arándano. En las laderas de la parte occidental se cultivan viñedos.
En los bosques abundan grandes mamíferos como ciervos, ciervos y jabalíes. Otras especies destacadas son el urogallo, el halcón peregrino, el búho de Tengmalm y el pájaro carpintero negro, entre otros.
Osos, bisontes europeos, alces, cabras montesas y castores se extinguieron hace décadas aunque hay planes a medio plazo para la reintroducción de algunas de estas especies en la región.