Turquía: Población
Turquía tiene más de 76 millones de habitantes, lo que da una densidad demográfica de unos 97 h/km². Se trata de una población moderna, que terminó la transición demográfica, pero con gobiernos claramente pronatalistas, lo que hace que sea una población claramente joven. El 27% de la población tiene menos de 15 años, el 66% entre 15 y 64 años y el 7% más de 65. El crecimiento de la población es moderado, sobre el 1,4% anual, superior a la de los países europeos. La tasa de natalidad es alta, sobre el 18‰, y la tasa de fecundidad supera los 2,2 hijos por mujer, lo que asegura el reemplazo generacional. La tasa de mortalidad muy baja, sobre el 6‰, sin embargo la mortalidad infantil se eleva hasta el 25‰, lo que nos habla de una sanidad defectuosa en las edades infantiles. La esperanza de vida al nacimiento es de unos 72 años.
La distribución de la población en Turquía es muy irregular. Las áreas costeras están mucho más pobladas, y el oeste mucho más que el este. Las llanuras costeras del Egeo y el mar de Mármara superan los 200 h/km², tanto en el lado asiático como en el europeo. No obstante, en la Anatolia central se encuentra Ankara, la capital, que concentra grandes densidades de población, y Konya. Más del 65% de la población vive en ciudades, después de una auténtico éxodo rural que afectó a todo el país en la década de 1970. Las principales ciudades turcas son:
Estambul, 11.755.536 h
Ankara, 3.984.069 h
Izmir, 2.758.707 h
Bursa, 1.528.542 h
Adana, 1.452.509 h
Gaziantep, 1.316.266 h
Konya, 967.567 h
Antalya, 802.941
Kayseri, 763.359 h
Mersin, 631.201 h
Diyarbakir, 607.339 h
Eskisehir, 592.251 h
Estambul tiene más de tres veces la población Ankara. Hay seis ciudades millonarias, y 74 con más de 100.000 habitantes. A pesar de todo no se puede hablar de macrocefalia de Estambul, ya que hay una densa red de ciudades medias. En el este predominan los asentamientos rurales, salvo en sus zonas costeras, que tienen grandes densidades de población.
Turquía ha sido un país de emigrantes. A parte de la migración interior, que provocó el despoblamiento del campo en favor de las zonas industriales, hay una importante emigración exterior que afecta a más de cinco millones de turcos, cuyos destinos principales son Alemania, Francia, Bélgica, Libia, los países del Golfo Pérsico y Estados Unidos. En la actualidad se distribuyen, también, por el resto de los países de la Unión Europa, aunque con porcentajes menores. Por el contrario, desde la caída del muro de Berlín Turquía ha comenzado a recibir inmigrantes, principalmente musulmanes procedentes de los antiguos países del este.
La mayoría de la población de Turquía es de origen turco, aunque existen minorías importantes de kurdos, circasianos, zazas, bosníacos, georgianos, laz, gitanos, árabes, griegos, armenios y judíos. No obstante, los porcentajes son poco fiables por que las autoridades turcas no recogen datos sobre filiación étnica.
Oficialmente Turquía es un país laico, por lo que se prohíben los símbolos religiosos en los edificios públicos, y el uso del hiyab por las mujeres, aunque el 99% de la población es musulmana. Existen minorías de cristianos, principalmente ortodoxos griegos y armenios, judíos y yazidistas.