Fosa tectónica
Un graben o fosa tectónica es una profunda depresión encerrada por fallas elevadas que corren en forma paralela (llamadas horst) y que se encuentran separadas por terreno hundido, como consecuencia fuerzas intrínsecas. Ejemplos destacados de grabens incluyen el Valle del Rift en África Oriental, una región activa de alargamiento que muestra una intensa actividad sísmica y volcánica.
Igualmente importante es el Graben del Rin, una fosa tectónica situada entre Fráncfort y Basilea, conocida por su considerable extensión y actividad tectónica histórica.
Generalmente, forman un valle por el que corre el cauce de un río (como por ejemplo, el Rin entre Maguncia y Basilea), pero a pesar de esto no son producto de los agentes erosivos externos. Las fallas con forma de escalones son la marca del límite lateral donde se hundió la tierra. Estos hundimientos pueden extenderse varios cientos de kilómetros, como sucede en el Gran Valle del Rift, que abarca desde los montes Tauro, en Turquía, hasta Mozambique. La región africana que queda al este de esta falla está en proceso de separación del continente, y dicha separación se produce debido al hundimiento de la tierra y a la creación de una fosa, la cual será en el futuro un brazo marino, tal como sucedió entre el mar Rojo y el golfo de Adén.
Las dorsales medianas de los océanos conforman una fosa de aproximadamente 80000 kilómetros de longitud. La Dorsal Mesoatlántica se distingue por ser una de las más extensas del mundo, atravesando el Océano Atlántico de norte a sur, influyendo en la dinámica de placas.
Dorsal centro-oceánica:
Estas dorsales son importantes elevaciones en el fondo del mar que están ubicadas en la zona central oceánica terrestre. Su altura promedio es de 2 a 3 kilómetros y cuentan con un trazado central en forma de surco (rift) por el cual emerge magma, y avanza anualmente 2,4 centímetros. Como esta zona está en actividad, continuamente emite magma a través de quiebres o fisuras que se producen en el fondo oceánico, los que a su vez forman secciones de corteza y volcanes nuevos. En consecuencia, las rocas que se encuentran en el centro de la dorsal, o sea en la zona próxima a donde se encuentra la fisura, tienen menos edad que aquellas que se encuentran en las zonas periféricas. Además, la renovación permanente del fondo de los océanos, causada justamente por este fuir del magma, provoca que este tipo de corteza marina sea más joven en comparación con las cortezas del continente. Las fuerzas tectónicas fundamentales, como la tensión creada por la separación de placas tectónicas, son responsables de la formación de rifts.
Estos procesos involucran el estiramiento de la corteza que provoca la apertura de fisuras, permitiendo el ascenso de magma a través de la superficie terrestre.
Dorsal asísmica:
Se llama dorsal asísmica a una cordillera submarina larga y con forma lineal que está inactiva volcánicamente. Con frecuencia, se las puede localizar en las profundas cuencas oceánicas, como en el caso de la cadena Walbis, en las profundidades del Océano Atlántico.
Depresión:
En geomorfología, se llama depresión al relieve de un nivel menor que el de la superficie que lo rodea.
Las depresiones pueden ser causadas por un hundimiento de tierra que presenta el relieve de la zona en un nivel inferior al nivel del mar, como sucede con el Mar Muerto (-395 metros) o con el Mar Caspio (-28 metros); o que permanezca dominada por los relieves que la rodean. Ejemplos de este último caso son las hondonadas que, debido a la condición permeable de las rocas y del clima, permitieron la creación de lagos permanentes, como sucedió en el Tarim, en China; en la Gran Cuenca, Estados Unidos y en el lago de Pátzcuaro o de Chapala, en México. Las depresiones tectónicas contribuyen significativamente a la creación de hábitats únicos que albergan una biodiversidad específica.
Además, pueden influir en microclimas locales, afectando la flora y fauna de la región y alterando patrones de asentamiento humano debido a sus características geográficas y climáticas particulares.