Geografía

Suiza: Economía

Publicado por Santiago

Commons Wikimedia: Vista de ZúrichSuiza es uno de los países más ricos del mundo. Su índice de desarrollo humano (0,955) lo sitúa entre las 10 primeras potencias. Es sede de grandes multinacionales, una industria especializada muy prestigiosa y un sistema financiero que ha sido referencia mundial durante muchas décadas.

Su agricultura aporta, tan solo, el 1,5% del PIB y acoge al 4% de la población activa, aunque en buena medida como segunda actividad, en agricultura a tiempo parcial. La industria aporta el 34% del PIB y acoge al 23% de la fuerza de trabajo, y los servicios aportan el 64,5% y acogen al 73% de los trabajadores.

La agricultura aporta muy poco a la economía suiza. Apenas se mantiene a sí misma, y necesita de subvenciones. La agricultura dirigida al mercado no cubre las necesidades del país. Está en auge la agricultura ecológica, sobre la que hay controles muy estrictos. A pesar de que Suiza es sede de multinacionales agroalimentarias,como Syngenta, Novartis y Nestlé, apenas se consumen en el país producto modificados genéticamente. A la agricultura tan sólo es el 10% del territorio, concentrada en la meseta suiza, el 25% a la silvicultura, y el 39% a pastos para la ganadería.

Su ganadería es de gran calidad. La vaca suiza ha sido una de las mejores razas de vacas de leche, y ha sido exportada a toda Europa. Pero más productiva que la ganadería en sí misma son sus productos derivados: quesos, mantequilla, yogures y su mezcla con chocolate, origen de la mayor multinacional agroalimentaria del mundo (Nestlé). Esta apuesta por la agroindustria es uno de los grandes valores de la agricultura suiza.

La actividad minera es prácticamente inexistente, a pesar de la gran actividad de su industria, y a pesar de disponer de grandes recursos hídricos, la electricidad suiza depende de varias centrales nucleares.

La industria ha sido más importante en el pasado de lo que lo es en la actualidad, debido a procesos de deslocalización. No obstante, sigue siendo una industria poderosa y de calidad. Destacan los sectores de la relojería, en los cantones de habla francófona, electrónica, electrodomésticos mecánica, farmacéutica y química. Multinacionales como Novartis, Hoffmann-La Roche y Rolex, son marcas conocidas en todo el mundo. Otras grandes multinacionales son Glencore, ABB, Adecco, Swatch Group, etc.

La industria está bien diseminada por todo el país, aunque los principales centros se encuentran en torno a Zúrich, Ginebra y Basilea, pero destacan lugares como Winterthur, Aarau, Olten, etc. La industria es muy poderosa, y su producción excede las necesidades de la población suiza. Sus productos se exportan a todo el mundo, aunque sus principales clientes son los miembros de la Unión Europea.

Los servicios han sido el sector por excelencia de la economía suiza, especialmente los servicios financieros, que fueron la bandera de la economía suiza durante décadas, gracias al secreto bancario, hoy en día menos estricto, y grandes compañías de seguros internacionales. Algunas de las multinacionales financieras más conocidas son UBS AG, Servicios Financieros Zúrich, Credit Suisse Group y Swiss Re.

Suiza, y especialmente Ginebra, es sede de numerosos organismo internacionales, y anfitrión de grandes reuniones. Sin haber sido miembro de pleno derecho de la ONU hasta el 2002 en Ginebra se encuentra la sede europea de la ONU, y las sedes de la Cruz Roja Internacional y la Organización Internacional del Trabajo, el Comité Internacional Olímpico, además de muchas otras. Esto es fuente de muchos ingresos para Suiza.

El turismo es uno de los motores de Suiza, especialmente en verano, en sus muy cuidadas ciudades, y en invierno para los deportes de nieve, además del turismo de congresos.

Es de destacar el sector científico y universitario, de gran calidad y prestigio. Es sede del CREN, uno de los mayores centros de investigación del mundo.

El sistema educativo suizo también contribuye significativamente a su economía. Las universidades suizas, como la ETH Zúrich y la Universidad de Ginebra, están entre las mejores del mundo y atraen a estudiantes e investigadores de todo el planeta. La alta calidad de la educación y la investigación ha fomentado la innovación y el desarrollo tecnológico, contribuyendo a la competitividad global de Suiza.

Además, Suiza ha sido pionera en la adopción de tecnologías limpias y sostenibles. El país ha invertido considerablemente en energías renovables, especialmente en energía hidroeléctrica, que representa una parte importante de su producción energética. También se están desarrollando proyectos de energía solar y eólica, con el objetivo de reducir la dependencia de las centrales nucleares y disminuir las emisiones de carbono.

El sector de la salud y el bienestar también es un pilar importante de la economía suiza. Suiza es conocida por su sistema de salud de alta calidad, que no solo proporciona servicios excepcionales a sus ciudadanos, sino que también atrae a pacientes internacionales que buscan tratamientos médicos avanzados. La biotecnología y la investigación médica son áreas de crecimiento, con empresas innovadoras que desarrollan nuevos tratamientos y tecnologías médicas.

El mercado laboral suizo es altamente competitivo y está caracterizado por una baja tasa de desempleo. Las políticas laborales flexibles y el alto nivel de formación de la fuerza laboral han permitido a Suiza mantener una economía dinámica y resiliente. Además, el país tiene una fuerte cultura de emprendimiento, con numerosas startups tecnológicas que están emergiendo en ciudades como Zúrich y Lausana.

Finalmente, la infraestructura de transporte de Suiza es de primera clase, facilitando el comercio y el turismo. La red de trenes suizos es conocida por su puntualidad y eficiencia, conectando las principales ciudades y regiones del país. Los aeropuertos internacionales, como el Aeropuerto de Zúrich y el Aeropuerto de Ginebra, son hubs importantes que conectan Suiza con el resto del mundo.